Según datos del Consejo General de Ópticos Optometristas, una de cada tres gafas de sol vendidas en España no supera los controles sanitarios necesarios. Al utilizar gafas de sol no homologadas, no protegemos adecuadamente nuestros ojos. El problema es que esto hace que, si las gafas no ofrecen la protección adecuada, las radiaciones dañinas penetran aún más en el interior del ojo. lo que resulta más perjudicial que no llevar ningún tipo de protección.
Por ese motivo, los expertos recuerdan la importancia de comprar gafas que cumplan con todos los parámetros de seguridad y calidad.