No es sólo oír bien.
Si hay algo que provoca rechazo a todo el mundo, eso son los audífonos.
Por desgracia, estas ayudas a la audición están tan asociadas a la vejez que causan rechazo en la mayor parte de las personas, impidiendo que muchas de ellas puedan beneficiarse de sus cualidades.
Utilizar audífonos no sólo nos ayuda a oír mejor cuando existe una pérdida auditiva, sino que mejoran la localización de sonidos y la orientación, mejoran las conversaciones en grupos o en ambientes ruidosos, disminuyen el riesgo de deterioro cognitivo y reducen la sensación de aislamiento característica de estos pacientes.
Además, gracias a las ayudas de conectividad digital, mejoran la comunicación y convivencia con el resto de la familia al permitir dirigir sonidos de móviles y televisores directamente a los aparatos.
Mejorar la calidad de vida es tan simple como ponerse un audífono.
Pide cita en nuestra centro de Pontevedra y te ayudaremos a encontrar la mejor solución para tus problemas auditivos.